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miércoles, 27 de febrero de 2013

Trabajos de madera muerta - Acebuche núm. 02.

Bueno, en esta entrada os voy a mostrar las razones que tiene este acebuche para echarse a temblar cada vez que me ve cerca y es que lleva unas cuantas horitas de trabajos en madera muerta...

Aquí tenéis la entrada antigua del acebuche donde se muestra el proceso desde que lo recuperé en el campo hasta aquí:

http://bonsaideandarporcasa.blogspot.com.es/2012/04/trasplante-de-un-acebuche-olea-europaea.html

Y sin más historias, vamos con los trabajos que hoy nos ocupan...

28 de marzo de 2012.- Así es como estaba el arbolillo, ya descansando tras el trasplante a su nueva maceta.


01 de septiembre de 2012.- Recorté un poco más la parte superior del tronco para redondear la copa y que no sobresaliera ninguna parte muerta, quedando el arbolillo un poco más bajito. Y seguidamente comienzo a alambrar todas las ramas.



No tomé más fotos del alambrado del resto de las ramas, pero bueno, se ve más adelante...

14 de febrero de 2012.- Que comiencen los trabajos de carpintería... Si bien tras recuperar el árbol utilicé en la madera muerta el taladro con brocas para madera y cepillos de alambre también para el taladro, eran trabajos más bastos, teniendo que utilizar ahora otro tipo de herramientas.

Estas son las fresas que he usado, con una herramienta similar a la dremel además de las clásicas brocas del taladro, que cuando hay mucha madera que retirar, son lo más rápido y cómodo.


Estas fresas comen la madera muy despacito para mi gusto, pero bueno como no tengo otras, hay que conformarse... A echar más horas y listo.





Aquí se aprecia el agujero realizado con la broca, que finalmente atravesaría hasta la parte de abajo, uniéndose con el gran hueco de la base y que posteriormente sería tallado en su totalidad para evitar que pareciera artificial e intentar en todo lo posible que aparente estar creado al haber muerto el árbol, secándose parte de la madera, y haber revivido otra parte del mismo.














El destornillador me ayudaba a sacar virutas por el hueco del tronco, no tiene más misterio...


Y aquí vemos como va quedando el tronco hueco...



 


Y trabajo finalizado.... de momento. Así estaba tras aplicar el líquido de jin, aún se nota que el arbolillo está tiritando de miedo, por eso quedan las fotos medio movidas...






Y en estas dos fotos son las últimas en las que veréis la rama superior izquierda, ya que decidí que estará mejor sin ella, no me gusta como queda, así que... matarile!!



Ya se observa el hueco que deja la rama... En breve el hueco será más grande ya que también he quitado todo el trozo de madera que la sujetaba...








... Y eso es todo, espero que os haya gustado... Por cierto, el árbol ya está más tranquilo... Hasta pronto.

                                                                                                                                     Pablo Hernández.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Árbol de Júpiter - Lagerstroemia indica

Antes de nada pido perdón por este letargo en el blog, pero esque soy poco de oficina y mucho de calle, y me cuesta ponerme aquí a escribir...

Este arbolillo lo recuperé el día 02 de febrero de 2011 en el mismo lugar que el granado que ya os he mostrado en entradas anteriores. Junto a este pequeño árbol de júpiter, había otro bastante más grande que dejé para otra ocasión, pero cuando volví al año siguiente, allá por el 2012 ya fue demasiado tarde y habían arrasado con la mayoría de los árboles para limpiar la zona...

A lo que vamos, al principio no tenía ninguna rama, salvo las que salían del nebari, y al pasar el tiempo creí que no brotaría; todos los árboles que había junto a él, habían brotado ya pero éste no enseñaba ni una mísera yema que hiciera ver que estaba vivo...

02 de febrero de 2011.- Recién recuperado.


Pero finalmente y allá por agosto hizo un gran acto de valentía y me dio un sorpresón volviendo a la vida y comenzando a brotar un montón de ramas por todo el tronco con un vigor espectacular.
                              
                                  14 de agosto de 2011                         18 de septiembre de 2011

Durante el otoño y el invierno aproveché a tallar un shari a lo largo del tronco y así disimular un poco toda esa parte recta. También alambré las ramas para comenzar a dar un poco de forma... En marzo de 2012 vuelve el calorcito y la nueva brotación... Vuelta a la vida...



A últimos de julio una nueva sorpresa... El arbolillo quiere echar flores... Pues vaya si está contento!!!


Y una semana después.... Tachaaan!! florecitas rosas y amarillas



Y esto ya no paraba, era una máquina de hacer flores!!!



Finalmente tuve que cortar bastantes para evitar que el árbol invirtiera toda su fuerza en sacarlas adelante...


Y aun así no dejaba de echar más y más flores... No se si os habéis fijado en las fotos anteriores, pero también estaban saliendo gran cantidad de nuevos chupones directamente de las raíces del árbol. También los quité todos pero siguieron saliendo más y más a lo largo del tiempo...



...Y así siguió floreciendo hasta mediados de octubre...



A mediados de octubre comenzó a perder las flores y a secar las hojas dejándolas con un tono rojizo...


Ya por fin a últimos de noviembre de 2012 terminó de perder todas las hojas...


A 25 de enero de 2013, toca alambrar, despacito y sin prisa, ya que por un lado tiene la ventaja de trabajar agustito sin hojas, pero por otro tiene la desventaja que el árbol tiene ya todas las yemas que brotarán en la próxima primavera y es muy fácil que se arranquen al tocarlas...


Respecto de la rama baja de la izquierda, alambré solamente la principal ya que las otras eran muy finas y creo que es mejor dejarlas hasta el año que viene.
  

Ya se va viendo la forma de la copa...

05 de febrero de 2013.- Y finalmente, así es como queda con el alambrado.



Dos días más tarde decidí ponerlo en una maceta más ancha y bajita para comenzar a descubrir el nebari al ser éste una de las partes más chulas del tronco, así que al lío...


No retiré la tierra antigua, ya que lleva solamente dos años con ella y no quiero que sufra el estrés del trasplante, así que retiré todo el bloque de tierra junto con el árbol, colocándolo en el centro de la nueva maceta y rellenando el hueco de alrededor con tierra nueva.


Y esto es lo que quedó. Finalmente así es como está a día de hoy. Ahora a mimarlo para que ramifique más y coja fuerzas para el próximo trasplante, que será ya a su macetita de bonsái... Un saludo y hasta pronto...


Pablo Hernández.