25 de enero de 2011.- El de la entrada que os estoy escribiendo es el de la izquierda. El otro también lo cogí, pero acabó secándose...
...Subiendo conmigo en el ascensor...
Y a empezar a plantar...
08 de junio de 2011.- Aquí decidí comenzar a doblar el ápice para bajarlo hasta la masa de verde que hay abajo, pero más tarde desistiría de esta idea, de lo cual hoy me alegro.
18 de septiembre de 2011.- Y aquí ya sin la rama superior. La red metálica que hay sobre la maceta tuve que ponerla en verano en todos mis bonsáis porque las mirlas venían día sí, día también, y revolvían toda la tierra buscando humedad y me dejaban todas las raíces al aire. Cuando se fue pasando el calor escarvaban la tierra en busca de lombrices que llevarse a la boca... "que la crisis es mu mala..."
Esta vez en mis trabajos tuve una buena ayuda... Mi hija Sofía, de tres añitos eliminando la tierra vieja y desenredando raíces con el palito de bambú...
Y por fin sin tierra. Corté lo que quedaba de la raíz principal gruesa que quedaba en el medio y que aún se apreciaba en esta foto...
Aquí se aprecia ya sin la mencionada raíz.
Y el resto de vistas del bonsái. Como habréis observado, lo que hay debajo no es una mesita clásica de bonsái, es la CPU de mi ordenador jajaja...
Aún queda pinzar la copa, pero bueno, eso ya para otro día...
Y finalmente os dejo el antes (26-01-2011) y el después (02-02-2012)
Pablo Hernández.
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